¿En qué estado de obsesión o estulticia tiene que encontrarse una persona para vivir a una mascarilla pegada?
Sentirse cerca de Pulka y de Yobe, al norte de Nigeria, aunque sea a través de unas letras hilvanadas, provoca que los problemas de nuestro andar por casa se trivialicen.
Esta semana de agosto de 2017 más de ochenta personas han muerto en el planeta Tierra a causa del fundamentalismo yihadista (250 en lo que llevamos de mes y alrededor de doscientas mil desde la masacre de las Torres Gemelas de Nueva York el 11 de septiembre de 2001). La manada de lobos lo tiene claro. Y el terrorista abatido en Cambrils, también: “Matar a todos los infieles”.
El periodista recibirá este lunes 30 de mayo el Premio Canarias de Comunicación en el Auditorio Alfredo Kraus. Y como no le debe nada a nadie, hablará claro de los conflictos invisibles. Y el respetable aplaudirá y estará orgulloso del hijo patrio que, minutos antes, ha reclamado otra mirada para África.