El legado del arquitecto requiere que Santa Cruz de Tenerife tome conciencia de la riqueza escultórica que atesora en su espacio urbano y le rinda el homenaje que merece.
Todo empezó en la orilla, en la erosión constante. Y de ahí, las corrientes le llevaron al Mundo. Maletas de ida y vuelta, composiciones de herrero y herramientas poéticas y surrealistas.
Tenerife Espacio de las Artes es estos días un territorio único de materia contemporánea, como el Ten-Bel modélico que los arquitectos se sacaron de la manga (prodigiosa) y hoy en día es el "Chernobil de Tenerife".
Nos afligimos ante el fallecimiento de uno de los arquitectos canarios referentes durante la segunda mitad del siglo XX. Y rezamos con él y le recordamos y peregrinamos a sus cuatro viviendas del Camino Largo de La Laguna como si fuéramos estudiantes de escuela universitaria ávidos de sueños o, simplemente, amantes del pulchrum que se recrean ante la forma.
Resulta que el arquitecto Rafael Escobedo de la Riva ha ganado el concurso de ideas para la reforma y transformación del Polideportivo de Frontera en El Hierro. Y ha acertado con esta intervención que será luminosa y pegada a la tierra. Porque después hay otras arquitecturas soberbias, alejadas e iconográficas, propias del 'star system', que se diseñan (algunas) en servilletas de papel y triplican presupuestos.
Ahí estaba, impertérrito, controlando la situación desde arriba y sin perder detalle. Aunque no fuera noticia, resultaba imposible desdeñar su presencia. El aguafuerte 'La raíz del viento' ha sido un secundario de lujo en la ronda de contactos de cara a la investidura.
Los destellos del pintor superan cualquier resquicio para iluminar el jardín. Es la conquista del paraíso de Vangelis. Es la trascendencia de lo terrenal. Es un kramer contra kramer sin acritud, porque en los opuestos del círculo cromático está la complementariedad y la armonía.
Pasan algunas horas del fallecimiento del que fuera premio Canarias de Bellas Artes en 1988. La capilla ardiente se ha instalado en el Salón Noble de la Casa Consistorial, que rigiera el fenecido entre 1979 y 1987. Hace frío y los verodes de los tejados velan al pintor. Y velarán durante toda la noche y el día siguiente. Y de nuevo la noche y siempre. Porque los verodes no duermen y son patrimonio de los laguneros y de la Humanidad.
Cosas de la crisis que no del querer, porque para amores ya estaban Dulce y Fernando, que lo sellaron ante Dios en la iglesia del Santísimo Redentor de Las Chumberas. Así todo quedaba en casa…