Pasen y vean: insectos de caparazón duro y vientre blandengue en el show de la poltrona y de la espectacularización de la noticia.
Tras la toma de Granada en 1492 el ideal patrio continúa en proceso y sin un horizonte claro y común. Es más quijotesco que posible, más conjetura que certeza. Es un suicidio lento, afirmó Menéndez Pelayo.
¿Monarquía o República? Fui juancarlista, soy felipista y espero no ser súbdito de Leonor.
Y los niños catalanes del Felipismo y del Aznarismo crecieron y reventaron granos en la cara. Y se sentaron en torno a una mesa. Ya pensaban por sí mismos e, indignados, hicieron piña con la extrema izquierda de Podemos. ¡Independencia! ¿Alguien, a estas alturas, se extraña? ¿Todavía vamos con el lirio en la mano?
A propósito del exconcejal de Urbanismo que se retiró de la política desencantado de sus protagonistas.