La obra de Plensa es cálida. Siete metros para una joven por la que se suspira ajena a banderías y ruidos. Gratifica la cultura, la poesía del sentimiento, la feminidad sin complejos.
El legado del arquitecto requiere que Santa Cruz de Tenerife tome conciencia de la riqueza escultórica que atesora en su espacio urbano y le rinda el homenaje que merece.
Todo empezó en la orilla, en la erosión constante. Y de ahí, las corrientes le llevaron al Mundo. Maletas de ida y vuelta, composiciones de herrero y herramientas poéticas y surrealistas.
Ahí estaba, impertérrito, controlando la situación desde arriba y sin perder detalle. Aunque no fuera noticia, resultaba imposible desdeñar su presencia. El aguafuerte 'La raíz del viento' ha sido un secundario de lujo en la ronda de contactos de cara a la investidura.