En cierto renglón de 'El olvido que seremos' Héctor Abad Faciolince (cautivador segundo apellido) pasa de refilón por un paternal 'Manual de tolerancia', soslayo suficiente para que cale muy hondo una frase que arrebata y llega a tiempo. Y pienso en los seis de casa… Tortolín que es uno… Y pienso en los universitarios de Periodismo ULL que un día de diciembre regalaron un trozo de amor a la memoria.
El periodista podría ser el último mohicano de aquella tribu de 'Gaceta Semanal de las Artes'. Continúa en la brega más afanoso que nunca y se reinventa. La innovación es necesaria. En Twitter se llama @cosmejuan: seudónimo digital con el que llega a mucha gente. No es Cristiano ni el papa Francisco ni Lady Gaga, pero sus números son de 'influencer'.